
Él absorbió mis pecados, mis pesares y mi vacío. Me dijo que yo estaría bien mientras que siga a su lado, pero no tenía ni idea de lo que hacía por mi.
Cada noche, antes de irme a dormir, el ponía su mano en mi frente y esperaba a que durmiera. De esa forma se metía en mi mente y lo absorbía todo por completo.
Mientras que yo me levantaba totalmente radiante, él enfermaba más y más. Los días pasaron así, sin más.
El sólo me decía "Quedate a mi lado" y yo lo hacía, pues lo amaba.
Pero como todo en la vida, terminó .
Y esta es la historia de como el amor de mi vida se fue pudriendo hasta desvanecerse, todo ante mis ojos.
Esta es la historia de un egoísta; a su vez enamorado, que se sacrificó por su amada, por su felicidad. Cegado por el amor actuaba y ahora ya no está.
No hay comentarios:
Publicar un comentario