Estás tan desesperada en busca de compañía, que no te has dado cuenta que siempre estuve aquí. Pero no me escuchas, no lo ves.
Dime, ¿a quién esperas? ¿qué buscas?
¿Por qué no despiertas?
Cariño.
Ya basta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario